Tras una proyección de los mejores besos de película, esos besos que todo el mundo recuerda; Titanic, Casablanca, La Dama y el Vagabundo, entraron Miriam y Marc al banquete, atravesando la pantalla y dándose un beso ante la mirada de todos los invitados.
Y es que su historia es de película. Todo empezó como un juego de niños, a los que el destino les depara grandes aventuras, momentos inolvidables y algún momento difícil, pero sobretodo amor y sueños cumplidos.
La suya fue una boda de ensueño, llena de mensajes de cariño de sus amigos y familiares. Una boda como la que siempre había soñado Miriam y tenía que ser en su ciudad, Barcelona, a pesar de estar lejos y que la vida deportiva de Marc les haya llevado hasta Israel. Todo fluía a la perfección, en un marco idílico como el hotel W de Barcelona, organizado al mínimo detalle por Sophie Kors Weddings, que se encargaron de que no se escapara ni el más mínimo detalle, haciendo que los sueños y las peticiones de Miriam y Marc se cumplieran en un día tan especial.
Y como broche de oro a una relación de más de 10 años, en la que dos adolescentes comenzaron su aventura, cumplieron propósitos, superaron baches y distancias y, como dijo Miriam, “seguramente será el único día en el que podremos reunir a toda la gente que queremos al mismo tiempo en el mismo lugar”, Miriam hizo uno de los mejores regalos de la noche a Marc, un video que rozaba lo cinematográfico, en las que se veía cómo un niño cumplía su sueño de convertirse en deportista de élite.
Boda Miriam y Marc
Hotel W Vela
Barcelona
2015
Fotografía Señor y Señora Smith
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